¿TE SUENA EL SÍNDROME DE LA IMPOSTORA?
¿Alguna vez has sentido que no mereces lo que has logrado, o qué lo que has logrado no era para tanto? ¿O que en cualquier momento alguien fuera a descubrir que no eres tan buena como pareces? Si has respondido que sí, tranquila: no estás sola. Ese sentimiento tiene nombre y se llama síndrome de la impostora.
Y aunque suena muy técnico, es algo muy humano. Es esa vocecita interna que te dice que tu éxito se debe a la suerte, que no eres tan capaz como creen los demás, o que tarde o temprano se van a dar cuenta de que eres un fraude. Sí, es una forma de pensamiento muy rígida, inflexible y muy autocrítica. Y es más común de lo que imaginas.
Señales de que podrías estar pasando por el síndrome de la impostora
Estas son algunas pistas claras:
- Te cuesta aceptar cumplidos. ¿Te dicen que hiciste un gran trabajo y tú respondes “no fue para tanto”? Un clásico.
- Sientes que necesitas trabajar el doble que los demás para estar “a la altura”.
- Tienes miedo de asumir nuevos retos, por si no los puedes lograr.
- Vives con la sensación de que no sabes lo suficiente, aunque tengas experiencia.
- Te comparas todo el tiempo con otras personas (y sales perdiendo).
¿Por qué sentimos esto?
Hay muchas razones por las que aparece el síndrome de la impostora:
- Por una baja autoestima y un autoconcepto distorsionado.
- Porque nos enseñaron a no “alardear”. Desde pequeñas nos dicen que hay que ser modestas.
- Por los estereotipos de género. Muchas mujeres sienten que tienen que demostrar el doble para ser tomadas en serio.
- Por la comparación constante. Vivimos en la era de los juicios de valor, de estipular que está bien o mal, que es mejor y que es peor. Las redes sociales no ayudan mucho: todo el mundo parece tener la vida perfecta.
¿Qué ocurre si no hacemos nada?
Ignorar el síndrome de la impostora puede hacerte sentir agotada, frustrada y atrapada. Puedes terminar diciendo que no a oportunidades increíbles solo porque no te sientes “suficiente”. Y eso, sinceramente, no es justo contigo misma. Estas dejando de hacer cosas,
¿Y cómo lo combatimos?
Buena noticia: sí se puede salir de ahí. Te comparto algunos tips que a muchas mujeres nos han servido:
- Haz una lista de tus logros. Sí, en serio. Escríbelos. Todos.
- Habla del tema. Cuéntaselo a una amiga, a tu pareja o a alguien de confianza. Vas a ver que muchas han pasado por lo mismo.
- Permítete equivocarte. No todo tiene que salir perfecto.
- Evita compararte. Cada persona va a su ritmo.
- Rodéate de gente que te haga bien. Buscar apoyo en una red de mujeres reales, que no perfectas, ayuda muchísimo.
Para acabar..
El síndrome de la impostora no define quién eres. Es solo una creencia que aprendiste en algún momento… y que puedes desaprender. Porque sí: mereces estar donde estás. Y no, no fue suerte, ha sido mucho esfuerzo y sacrificio. Ya es hora de empezar a creerlo.
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